Hoy, día del Señor 5 de septiembre de 2006, a las 17.20 horas, he conseguido mi libertad completa. Hoy, después de 184 días de dolor, sufrimiento, lágrimas y desesperación, después de 184 días de una lenta, pero imparable, recuperación, con sus altos y sus bajos, después de interminables sesiones de rehabilitación en las que el dolor era omnipresente, hoy, el médico que ha venido controlando mi rehabilitación, me ha dado el alta definitiva. ¡Por fín!
No sabeis lo contento que estoy hoy ... Parece mentira pero todo se acaba ... y hoy, es precisamente ese final. Ese punto y seguido de una etapa casi 6 meses que prefiero olvidar.
El alta definitiva no significa que no tenga que continuar haciendo ejercicios de musculación. No tengo del todo recuperada la musculatura como antes del accidente, sobre todo a nivel de cuádriceps. Pero, como mínimo, ya me siento bastante seguro a la hora de subir y bajar escaleras. No me tengo que coger a la barandilla ni estar pendiente de mi equilibrio.
El médico me ha recomendado que me compre una bicicleta estática y que vaya haciendo sediones en casa como las que iba haciendo en la sala de rehablitación.
No hay mal que cien años dure ... ¡Qué a gusto que estoy!
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2 comentarios:
Enhorabuena, Santi!! Nos alegramos mucho desde aqui que haya acabado la tortura de la recuperacion... Y sobre todo, no dejes de lado lo de la bicicleta. Animos!
Ya me la he comprado ... el proximo jueves me la traen a casa. ya os contare como va ...
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